Bueno pues esta noticia no hace sino confirmar nuestras sospechas: cobramos menos que todos nuestros vecinos europeos y hablan de datos relativos al sueldo respecto al coste de la vida.
Es escalofriante ver que el 40% de los titulados españoles tardamos cinco años en irnos de la casa paterna.
Y es que la bomba de relojería que componen los precios de los pisos y los pauperrimos sueldos es muy potente.